El fregadero es un elemento imprescindible en la cocina, por lo que debe ser funcional, adaptado a tus hábitos y, por supuesto, también estético. No obstante, es tal la variedad de fregaderos que existe que seleccionar uno puede resultar abrumador, razón por lo que te mostramos los diferentes tipos de fregadores que existen.
1. ¿Qué tipos de fregaderos hay disponibles?
Hoy en día, el mercado ofrece una amplia selección de fregaderos que se corresponden a diferentes criterios, incluyendo la configuración, el método de instalación, el material de fabricación y la forma, cada uno con sus propias ventajas, lo que puede dificultar tomar la decisión a la hora de escoger uno. Con esto en mente, revisamos los distintos tipos de fregaderos disponibles, a fin de esclarecer las dudas que puedas tener al respecto.
1.1 Tipos de fregaderos según su configuración
Para satisfacer los diferentes hábitos de cocina y fregado, los fabricantes disponen de diversas opciones de configuración que incluyen opciones de una o dos cubetas, con o sin escurridor incorporado.
El fregadero de una cubeta es la opción ideal para cocinas pequeñas, pero también es adecuado para los que hacen un uso limitado de la cocina. Si estás acostumbrado a lavar los platos a mano, el fregadero de una cubeta con escurridor puede ser la opción ideal para ti.
Por su parte, el fregadero de doble cubeta resulta ideal para cocinas más grandes, familias numerosas, chefs exigentes o usuarios particularmente activos en la cocina, pues ofrece todo el espacio para estar cómodos. Este tipo de fregadero dispone de dos cubetas, una de los cuales suele ser más pequeña, la cual se utiliza, por ejemplo, para lavar o escurrir frutas y verduras.
Estos fregaderos también se pueden equipar con un escurridor. En cualquier caso la configuración del fregadero depende sobre todo del tamaño de tu cocina y del uso que hagas de ella.
1.2 Según el método de instalación
También existen diferentes tipos de fregaderos en función de su método de instalación, ya que puede existen opciones para montar a ras de superficie, encima de ésta o como subestructura en la encimera. Los principales tipos de fregaderos según su método de instalación son:
- Fregadero elevado, que es el más simple y económico, es una estructura que se instala directamente sobre un mueble diseñado especialmente para ello. Por lo tanto, el mueble del fregadero y el lavabo deben tener exactamente las mismas proporciones. Este tipo de fregadero es el más fácil de instalar y se adapta mejor a los conjuntos de cocina compuestos por módulos individuales.
- Fregadero para empotrar, el cual se instala en el orificio de una encimera sólida correspondiente a sus dimensiones, al tiempo que sus bordes sobresalen del exterior evitando que el agua fluya debajo de ellos, lo que garantiza una mejor limpieza.
- Fregadero integrado: con este método de instalación, el fregadero se nivela a ras con la encimera, se conecta, se sella y, por lo tanto, se fusiona en una sola superficie de trabajo.
- Fregadero bajo encimera, cuya compleja instalación se realiza por debajo del nivel de la encimera, lo que requiere, entre otros aspectos, un sellado completo de las superficies circundantes. Si bien su instalación no es la más fácil, este tipo de fregadero ofrece más opciones para crear el estilo que más te convenga y es muy usado en elegantes diseños de cocinas.
1.3 Según el material de fabricación
Para crear un estilo único en tu cocina, existen fregaderos en diversos materiales, por lo que la elección del tipo adecuado de fregadero dependerá del aspecto final que desees, pero también del uso diario que vayas a hacer de él. En cualquier caso, hay disponible fregaderos fabricados en:
- Acero inoxidable: los más habituales, los fregaderos de este material destacan por ser resistentes a impactos y a temperaturas extremas, así como por no absorber olores ni colorantes y limpiarse fácilmente, además de estar disponibles es una amplia gama de precios.
- Cerámica: los fregaderos fabricados en este material son muy apreciados porque, incluso después de años, conservan su belleza y brillo natural, además de ser resistentes a las manchas, los arañazos o las temperaturas extremas y ser muy fáciles de limpiar. No obstante, este tipo de fregadero suele ser pesado y vulnerable a los golpes.
- Granito: hechos a partir de una mezcla granito triturado, pigmentos y resinas sintéticas, este tipo de fregadero se distingue por su alta resistencia y por la variedad de colores disponibles. Si está buscando algo diferente a un fregadero clásico de acero inoxidable, el granito es la opción indicada pues ofrece una combinación ideal de elegancia, durabilidad y calidad.
- Acrílico: los fregaderos fabricados con este material son comunes y apreciados por ofrecer una estupenda resistencia a las manchas. Sin embargo, su tolerancia al calor es notablemente más baja en comparación a otros materiales.
- Tectonite: se trata de un material especial hecho a base resinas de poliéster y otros componentes reforzados con fibra de vidrio. Los fregaderos fabricados en este material ofrecen una buena resistencia y son fáciles de mantener. Sin embargo, el interior de estos fregaderos es trasparente, lo que ofrece una imagen estética que es calificada frecuentemente como poco atractiva.
1.4 Fregaderos según su forma
La elección del fregadero para la cocina depende principalmente de las dimensiones de la habitación y la ubicación de la unidad de suministro de agua. En función a estos criterios, los fabricantes han desarrollado una diversidad de fregaderos con formas especialmente diseñadas para adaptarse a distintas necesidades.
Esto abre posibilidades distintas a los fregaderos rectangulares estándar y permite considerar diseños interesantes de esquinas redondas, ovaladas, cuadradas e incluso triangulares. Tales soluciones pueden agregar un entusiasmo y estilo especiales a la cocina. De este modo encontramos fregaderos de forma:
- Rectangulares: el más habitual y frecuente, este tipo de fregaderos son fáciles de integrar en cualquier tipo de cocina y está disponible en una amplia variedad de colores y materiales.
- Cuadrados: usados con mayor frecuencia en cocinas compactas, los fregaderos cuadrados combinan bien con un estilo moderno y minimalista.
- Redondeados: cada vez más atractivos, los fregaderos de formas redondeadas son apreciados por su aspecto contemporáneo y por encajar perfectamente en cocinas de inspiración moderna.
- Trapezoidales: la forma que distingue a este tipo de fregaderos es ideal para optimizar el espacio en cocinas pequeñas.
- Esquineros: la solución ideal para aquellos que quieren colocar el fregadero en una esquina de la encimera de la cocina.
2. Conclusión
Después de familiarizarte con las ventajas y desventajas que distinguen a los diversos tipos de fregadores y comprender su funcionalidad, podrás seleccionar con precisión el fregadero perfecto para tu cocina, de modo que su uso cotidiano sea cómodo y ajustado a tus gustos y necesidades.
3. Productos Interesantes en Fregaderos para tu Cocina
Estos son los productos más interesantes que hemos encontrado en fregaderos para tu cocina. Son productos que te ayudarán a disponer de una envasadora al vacío en tu hogar y que más demanda tienen actualmente y que convencen a los usuarios por su calidad, precio o ambas cosas.
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5. Fuentes y Referencias
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